El lunes 16 de abril tuvo lugar la presentación pública en Sevilla de la XXVI edición del ‘Ranking de las 1.200 mayores empresas en Andalucía’, que elabora todos los años la revista Andalucía Económica, y que se ha convertido en una herramienta informativa de consulta obligada entre el tejido empresarial andaluz y nacional.
Ranking Andalucía Económica.
Consejero-Ranking Andalucía Económica.
El acto contó con las intervenciones de José Sánchez Maldonado, consejero de Empleo, Empresa y Comercio de la Junta de Andalucía; Alfonso Castilla Rojas, presidente del Consejo de Administración de Andalucía Económica; y Javier González de Lara Sarria, presidente de la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA). La presentación se celebró en la zona panorámica superior de las Setas de Sevilla.
El Ranking que cada mes de mayo edita Andalucía Económica viene siendo, desde hace 26 años, el reflejo impreso de lo que ocurre en el campo de batalla empresarial, y nos satisface constatar que esta edición hemos advertido menos bajas en este pelotón de supervivientes.
Sin duda ,ha contribuido la mejora del clima económico, pues el año pasado el PIB regional arrojó un crecimiento del 3,3%, dos décimas superior al registrado en España y más del doble de la Zona Euro, y por supuesto superior a los pronósticos de la mayoría de los organismos e instituciones. El propio Gobierno andaluz apuntaba un repunte del 3,1%. Crecieron todos los sectores productivos: sector primario (6%), industria (5,4%), construcción (3,8%) y servicios (3,3%).
La positiva evolución del sector primario se refleja en los resultados de las empresas dedicadas a esta actividad con presencia en nuestro ranking. Las aceiteras ocupan posiciones muy relevantes en esta relación empresarial, y prácticamente todas arrojan este año mejores resultados que el anterior, que no fue muy bueno debido a los bajos precios del aceite.
Así destacamos los crecimientos de Manzanilla Olive SCA (35,8%), Sovena (31,1%), Grupo Sierra Sur (31%), Grupo Coreysa (28,1%), Dcoop (24%), Oleoestepa (20,3%), Emilio Vallejo S.A. (18,4%), Aceites Maeva (16,9%), Aceites del Sur (10%), Agrosevilla (6,9%), Grupo Ángel Camacho (6,2%) y Deóleo (5,6%).
Amén de este talismán de la despensa andaluza, en general las cooperativas agrarias y sociedades agroalimentarias han cerrado en 2015 un buen ejercicio. Algunos ejemplos de ello son Caparrós Nature (+46,9%), Alhóndiga La Unión (+36,7%), Freshroyal (+26,24%), Rijk Zwaan Ibérica (+21,9), Onubafruit (+18,8%), Fresón de Palos (+18,27%), Moguer Cuna de Platero (+16,6%), Procavi (+16%), Grupo Arroyo Pérez (+13,6%), Vicasol SCA (+12,1%), Hortofrutícola Costa de Almería (+11,2%), Eurocastell SAT (+11,15%), Grupo Almendras Francisco Morales (+10,5%), Grupo Mariscos Rodríguez (+10,5%), Única Group (+10%), Herederos de Luis Jiménez (+10%), Ubago Group Mare (+9,2%), Agroejido, (+9,1%), Murgiverde (+8,1%), Herba Ricemills (+7,8%), Fulgencio Spa (+7,2%), Famadesa (+5,4%), Covap (+5,2%), Usisa (+5%), Pernord Ricard (+4,9%), Fercampo (+4,7%), Granada la Palma (+3,7%), Covirán (+3,5%), Suca SCA (+3,4%), Grupo Agroiris (+2,7%) y Alsara (+2,7%).
Los crecimientos en la facturación de las empresas Sovena, Ubago Group Mare y Bodegas Estévez obedecen fundamentalmente a su relación de interproveedores con Mercadona. En el caso de Sovena, compañía con sede en la localidad sevillana de Brenes, su único cliente en España es esta cadena de supermercados, y ha crecido en 2015 un 31% hasta los 716 millones de euros. Su plantilla se ha incrementado también un 9% hasta las 435 personas.
Las ventas de Ubago, grupo malagueño especializado en conservas, ahumados y salazones, también han crecido un 8% en 2015, hasta los 238 millones de euros, gracias también a su relación con Mercadona. El grupo, que tiene siete plantas en el exterior, cuenta con una plantilla de 3.800 trabajadores a nivel mundial, de los que algo más de 600 están en España. Mercadona ha contribuido asimismo al crecimiento de la firma José Estévez, que elabora para la compañía de supermercados 52 referencias de bebidas alcohólicas y cerró 2015 con una facturación de 97 millones de euros.
Industria
En el ámbito industrial, Andalucía presenta similitudes con el resto de España, sin embargo, el 73% del valor de su industria se concentra en solo tres grandes ramas: industria química y farmacéutica (35%), industria alimentaria (28%) y la producción y fundición de metales (11%); teniendo esta última un papel mucho más relevante que a escala nacional. Menos importante en nuestra región es la producción de materiales de transporte.
En general, el sector tiene poca relevancia en Andalucía, aunque hay que reconocer que aquí las compañías más fuertes y las que más empleo generan son grandes industrias como Cepsa, Abengoa, Grupo Endesa y Airbus Defense & Space. Según los datos aportados por estas compañías, vemos que Cepsa ha disminuido en 2015 su cifra de ventas un 19,2%, a tenor de los bajos precios del petróleo; Abengoa tuvo un retroceso similar, lógico por la situación destapada a finales del pasado ejercicio que reveló una elevada deuda acumulada y empujó a la multinacional a solicitar el preconcurso de acreedores. Por su parte, el Grupo Endesa aumentó su facturación en Andalucía un 3,9%, en un ejercicio bastante positivo para las empresas energéticas.
Otras de las principales industrias en nuestra región, como Atlantic Copper y Acerinox, también disminuyeron levemente su cifra de negocio, poco más de un 2% en ambos casos. Las cooperativas farmacéuticas, sin embargo, se mantuvieron prácticamente en los mismos términos que en el anterior ejercicio: Cecofar (+6,6%), Cooperativa Farmacéutica Xerezana (+1,8%), Hefagra (+1,6%), Hermandad Farmacéutica Almeriense (-0,3%), Cofarán (-0,7%) o Grupo Farmanova (-2,6%).
Y en el resto de empresas del sector industrial, la tendencia dominante ha sido el crecimiento: Prodiel (+68,43%), Insersa (+52,5%), AGQ Labs (+38,6%), Fujitsu Ten España (+37%), Matsa (+36,6%), Grupo Cosentino (+29,4%), Grupo Premo (+25,7%), Grupo Alvic (+15,1), Liderkit Group (+14,9%), Siderúrgica Sevillana (+12,8%), Plásticos Ferro (+11,4%), Plásticos IMA (+11,4%),Carbures (+11,12%), Grupo Faasa (+9,8%), Plastienvase (+9,6%), Valeo (+8,6%), MP Ascensores (+6,19%), Cobre las Cruces (+4%), APM Terminals (+3,8%), Torraspapel (+3,6%) o Brenntag Química (+3,5%).
Destacan, sin embargo, los negativos resultados de Laboratorios Farmacéuticos Rovi (-25,6%) –quizás ha tenido algo que ver el cambio generacional en su ejecutiva–; y de Grupo Elimco (-57%). Recordemos que este holding de ingeniería e infraestructuras, del que cuelgan otras once sociedades, está en concurso voluntario de acreedores desde agosto de 2015, al no lograr refinanciar una deuda de 18,5 millones de euros. También ha presentado un ERE para la práctica totalidad de la plantilla. En 2014, la compañía registró unas pérdidas de 5,9 millones de euros. El negocio más afectado por la suspensión de pagos es el relacionado con las instalaciones eléctricas e industriales.
Bajan los concursos
Los vientos favorables en nuestra economía, además de mejorar la salud de las empresas, han provocado que disminuya el número de procedimientos concursales. Así, durante 2015, el número de concursos de empresas publicados en Andalucía descendió un 21% hasta los 559 –fueron 705 en 2014–, según el Baremo concursal elaborado por PwC a partir de los datos publicados en el BOE.
La actividad concursal andaluza representó el 12% del total de concursos publicados en España, lo que la situó como la cuarta comunidad autónoma con más insolvencias, solamente por detrás de Cataluña (20%), la Comunidad de Madrid (15%) y Comunidad Valenciana (16%). Por provincias, Sevilla fue el territorio con más concursos publicados (147), seguida de Málaga (111), Cádiz (87), Granada (61), Almería (45), Córdoba (41), Jaén (34) y Huelva (33).
De momento, ha logrado evitarlo la multinacional andaluza Abengoa, que acumulaba a finales de 2015 una deuda corporativa de 9.300 millones de euros y anunciaba un plan de viabilidad para reducirla hasta los 4.923 millones de euros y evitar así el concurso de acreedores.
Entró en preconcurso de acreedores, pero desde el principio recibió de estos financiación para cubrir sus necesidades inmediatas de liquidez. Para evitar la quiebra anunciaba que se desprender’a de todos los negocios que no fueran de ingeniería, y de momento ha evitado el concurso porque consiguió que el 75,04 de sus acreedores la respaldaran para solicitar en el Juzgado de lo Mercantil número 2 de Sevilla la homologación del contrato de ‘standstill’ o prórroga en el proceso de negociación de su reestructuración financiera. Se trata del paso previo al acuerdo definitivo sobre el plan financiero. Este contrato da a Abengoa siete meses para lograr el mayor número posible de acreedores a su plan de rescate definitivo e impide durante ese tiempo que los acreedores puedan reclamar su deuda.
El último movimiento de la compañía ha sido anunciar medidas de ajuste que podrían afectar hasta a un 10% de su plantilla en España, todo ello en el marco del plan de viabilidad, que conlleva un proceso de racionalización y adaptación de su estructura organizativa. Abengoa posee un enorme valor como compañía viable, saneada y rentable, y su objetivo es completar el acuerdo que le permita recuperar la normalidad en sus actividades y seguir generando valor.
Otra emblemática empresa andaluza que el año pasado solicitaba el preconcurso de acreedores es Marypaz, que acumula una deuda cercana a los 30 millones de euros, en su mayoría con proveedores. Desde que en 2012 la compañía cerrara uno de sus mejores ejercicios, con una facturación de 176 millones de euros, su situación ha ido empeorando debido a la alta competencia en el sector de las zapaterías femeninas low cost. Marypaz cuenta con alrededor de 370 establecimientos propios y una plantilla de más de 1.200 personas.
Y más conocidas empresas andaluzas en concurso son el concesionario Nazarauto, la agencia de viajes y congresos Távora, entre otras. Asimismo, hace unos días, la compañía sevillana Vimac, una constructora fundada en 1967 y especializada en el ámbito electromecánico y ferroviario, pedía el preconcurso a fin de garantizar su viabilidad futura. En 2014, con una facturación de 35,5 millones de euros, firmó una refinanciación de su deuda bancaria, que ascendía a 16 millones de euros. El hundimiento de la obra pública no ha contribuido a mejorar la situación de la compañía, que cuenta con una plantilla fija de 41 trabajadores.
Unas entran y otras salen. A principios de año,la compañía andaluza de ingeniería y construcción Detea lograba el apoyo de sus acreedores para salir de la situación concursal en la que estaba inmersa desde mayo de 2012.
Previsiones
Salvo estos procesos de ajuste en nuestro sector empresarial, todo parece indicar que la recuperación sigue su curso. Según las previsiones de Analistas Económicos de Andalucía, la economía andaluza experimentará en 2016 un crecimiento interanual del 2,8%. En lo que respecta a la demanda interna, el consumo privado y la inversión se incrementarían en un 3,2% y un 4,1%, respectivamente, en tanto que el consumo de las administraciones públicas lo haría en un 0,6%. Por el lado de la oferta, el crecimiento se sustentaría en la aportación positiva de todos los sectores, que presentarían aumentos de la producción entre el 0,8%, en el sector agrario, y el 4,4%, en la construcción.
También prevé Analistas un incremento del empleo del 2,8% y una reducción del 5,3% en el número de parados, por lo que la tasa de paro rondaría el 29,8% en el promedio del 2015.
No obstante, otras instituciones aportan un punto de vista distinto. Hace unos días, el Banco de España advertía de cierto enfriamiento en la economía española en el primer trimestre del año, y de un empeoramiento en la confianza de las compañías. Al parecer, el clima de incertidumbre política está frenando muchas inversiones empresariales en nuestro país, ralentizando por tanto el desarrollo económico.
La inversión extranjera en Andalucía en el primer semestre de 2015 alcanzaba los 382,4 millones de euros, superando con creces la cifra total de inversiones realizadas a lo largo de todo el año 2014 (264,6 millones de euros). Afortunadamente, parece que la demanda interna resiste. Estaremos atentos a lo que ocurre tras el 26 de junio.