Con este mensaje Isabel Aguilera ha querido hacer hincapié en la situación actual de las empresas de nuestro país. La Asociación para el Progreso de la Dirección (APD) ha sido la encargada de organizar esta conferencia con el título ‘Cómo competir en el futuro inmediato’, donde la ex presidenta de General Electric y Google Iberia ha sido invitada de honor y ponente.
Isabel Aguilera APD
Durante la sesión, celebrada en la Fundación Valentín de Madariaga, Aguilera ha comenzado haciendo alusión al desafío digital al que deben enfrentarse las empresas para alcanzar el éxito. El comportamiento del consumidor ha cambiado debido a factores como la urgencia, la competencia o la cadena de valor. Isabel Aguilera subraya la necesidad de adaptarnos a esta realidad. La clave reside en construir negocios sólidos pero lo suficientemente flexibles para poderlos cambiar sobre la marcha.
Aguilera puntualiza tres respuestas para los grandes desafíos: el dúo eficiencia/excelencia en ‘customer centric’, la innovación y la exportación. Si la eficiencia es hacer más con los mismos recursos, la excelencia es conseguir el objetivo propuesto a la primera. Por lo tanto, en la búsqueda de un mundo de eficiencia debe aparecer intrínseca la excelencia.
Aguilera habla de la necesidad de abrirnos a otros mercados para alcanzar un volumen que dé rentabilidad. Afirma que “ahora podemos, sin movernos, llegar a mercados que antes no tenían sentido económico para nosotros”.
Otro de los apuntes que destaca Isabel Aguilera es el desafío de la guerra por el talento, la necesidad de tener a los mejores. Sin embargo, manifiesta que no hay un ser humano que posea todos los talentos. “La clave es la colaboración. Se necesita romper con las barreras del ser humano, sólo colectivamente podemos ser más inteligentes”. En este apunte nombra la carencia de ejemplos a seguir y la necesidad de un liderazgo distinto. Para conseguirlo, lo primordial es una buena formación, invirtiendo en tecnología e infraestructura.
Aguilera ha insistido en su intervención en la necesidad de crear un ecosistema para la innovación. “Si nuestra sociedad no quiere lo nuevo, difícilmente será innovadora” afirma contundente. Se requiere una cultura que no mate la iniciativa. “Sólo pensamos en el que paga las facturas y no innovamos”.
Aguilera declara que “en esta sociedad de colaboración lo principal es ser elegibles, es decir, ser el mejor en algo y cambiar las consecuencias de nuestra errónea educación”. Esta labor debe ser privada e individual, con el requerimiento de una gran cantidad de trabajo. “Cada uno debe especializarse en lo que tenga talento, no forzar algo en lo que no tenemos capacidades” afirma. Según la ex presidenta de Google Iberia, es imprescindible reconocernos para saber cómo son nuestros clientes. Para cumplir los objetivos destaca además cinco puntos clave: hacerlo simple, saber dar relevo cuando llega la hora, cambiar el control por el compromiso y la participación, salir de las zonas de confort y crear marca.
Al ser preguntada por las diferencias que observa entre las empresas españolas y las estadounidenses, Isabel Aguilera responde que España detenta un problema de pasividad. Expone ejemplos de cómo empresarios de otros países como India o Japón luchan incansablemente por conseguir éxito, mientras empresarios españoles se dedican a buscar culpables de su situación sin pelear lo más mínimo.