Ferrán Adrià durante un momento de su charla.

El martes 10 de mayo, Casa Ozama acogió un evento exclusivo con Ferrán Adrià donde se reunió con más de 90 restauradores de las provincias de Sevilla, Huelva y Cádiz. Un coloquio totalmente interactivo, donde habló de su trayectoria, qué le llevó al cierre de elBullirestaurante y en qué consiste su proyecto actual, elBulli1846.

El acto contó con la presencia de Ferrán Adrià, así como de otros socios colaboradores de elBullifoundation como Ferran Centelles, Silvia Timón, Silvia Sánchez o Ernest Laporte. Este evento, promovido por CaixaBank, pretende dar apoyo al sector de la restauración y poner en valor la especialización a través de unas jornadas de formación que se celebraron durante los días 10, 11 y 12 de mayo. Así, Casa Ozama colaboró con el programa de iniciativas desarrolladas dentro del Curso Intensivo en Gestión Hostelera que impartió el equipo de elBullifoundation, liderado por su presidente, Ferrán Adrià. Una formación que trató temas como la gestión de los restaurantes como pymes, la innovación, el control presupuestario, la relación con los clientes y una sesión dedicada a la gestión eficiente del vino, impartida por el experto Ferran Centelles.

Juan Manuel García, cofundador de Ovejas Negras Company y socio de Casa Ozama.

Para CaixaBank, iniciativas como ésta demuestran que la propuesta de Food&Drinks va más allá del ámbito financiero, ofreciendo un asesoramiento y un acompañamiento a los hosteleros, que deben ver en la gestión un pilar fundamental para construir el futuro de sus negocios.

El acto, de elBullirestaurante a elBulli1846, tuvo lugar en los jardines de la villa donde los asistentes disfrutaron de una charla interactiva.

Casa Ozama
Hace un año que Casa Ozama se inauguró con mucho poderío y con todos los ingredientes para el éxito. Más de 800 m2 de jardín salpicados de imponentes palmeras centenarias y cargado de sabor andaluz. Entre sus pérgolas y parterres no faltan jazmines, rosales, buganvillas, limoneros, olivos… y hasta una fuente central inspirada en las de los típicos patios del barrio de Santa Cruz. Lo que fuera la muy conocida localmente Villa Ozama (residencia particular construida en 1912, luego destinada a otros usos) es ejemplo del modernismo y regionalismo imperante en la zona ya que es vecino de los edificios diseñados por Aníbal González para la Exposición Iberoamericana de 1929 en el Parque de María Luisa, como la más que famosa Plaza de España. Todos sus ventanales, terrazas y balcones se asoman al emblemático y cinematográfico parque, auténtico pulmón verde del centro de la capital de Andalucía.

En el luminoso interior (con más de 550 m distribuidos en 4 plantas) se han respetado todos los elementos originales del edificio, destacando los ventanales y las majestuosas escaleras, todo realizado con el más exquisito cuidado que merece la protegida e histórica edificación. Cuenta con zonas de extensas barras, bares canallas, elegantes salones, comedores más informales y rincones escondidos para tomarse una copa.

El interiorismo rescata y actualiza el glamour de la época con suntuosos tejidos, estampados florales, papeles pintados, materiales nobles, mobiliario contemporáneo… que se mezcla con piezas especiales rescatadas de anticuarios de todo el mundo y golpes de humor en el que los animales/escultura juegan un papel protagonista.