Si hablamos de un mes decisivo para la naturaleza, ese es sin duda marzo. Son días cruciales para los campos de manzanos de Pink Lady en España, inmersos en el momento más determinante del año para esta fruta y que condicionará el éxito de la campaña. En este mes se sucede en los terrenos de Lleida —150 hectáreas— y Girona —200 hectáreas— un bello y efímero paisaje al dar comienzo la floración de sus frutales. Un espectáculo de la naturaleza que solo pueden disfrutar unos pocos privilegiados y en el que el cuidado y el mimo de los productores locales es básico para garantizar la conversión de las flores en frutas. A ello se suma la llegada de la primavera, una sinfonía de olores, colores y sonidos en la que los animales, y en especial los insectos polinizadores, velan año tras año por que el entorno natural mantenga su equilibrio y el ecosistema se conserve intacto temporada tras temporada.

Pink Lady quiere rendir un homenaje a la labor que llevan a cabo los 70 productores españoles estas semanas y propone celebrar la floración con un postre especial: una tarta fresca, perfecta para festejar cualquier evento y protagonizada por las manzanas más especiales del sector hortofrutícola. La tarta Flor Pink Lady del repostero Renan Oliveira cuenta una historia, la de la floración, que se percibe en su diseño y elaboración. Gracias al sabor y aroma de las manzanas Pink Lady, este postre tiene toques dulces, ácidos y suaves, que se unen a un aroma embriagador, que nos transporta a los campos de Lleida y Girona en esta época. «Para mí la repostería es una forma de expresar arte y creatividad. Te permite jugar con los colores, los sabores, las texturas… Es magia», explica Renan.

Asentado en Andalucía desde hace más de diez años y con obrador propio en Maracena (Granada) —también es un taller donde se puede aprender a elaborar dulces—, Oliveira decidió dejarlo todo —estudiaba Psicología— para dedicarse a su pasión, la repostería. Renan Oliveira forma parte de la familia Pink Lady desde 2020, cuando colaboró por primera vez con la marca. Desde entonces, ha desarrollado de la mano de la asociación recetas y vídeos en directo para los amantes de esta fruta. «Pink Lady ha sido una marca que siempre ha creído en mi trabajo y que desde el principio ha estado a mi lado apoyándome como chef y creador de contenido. Esa receta está inspirada en todo lo que Pink Lady representa: desperdicio cero, buen sabor, belleza, color y alegría en cada bocado», explica el pastelero. La tarta de primavera Pink Lady by Renan Oliveira es una edición limitada, que puede comprarse previo encargo en el obrador de Oliveira (calle Montevideo, 14) a 30 euros durante todo el mes de abril. Los más cocinillas también pueden elaborarla siguiendo los pasos de la receta, que se compartirá en las redes sociales de Pink Lady y del propio pastelero

Las Pink Lady son unas manzanas únicas en el mundo, resultado del cruce entre las variedades Golden Delicious y Lady Williams. Cultivadas en España respetando el proceso natural de los manzanos y sometidas a una rigurosa selección final, destacan por unas excepcionales cualidades, como es su seductor color rosado, un aroma irresistible, una textura crujiente y un sabor especial, dulce y rico en matices. En definitiva, el equilibrio perfecto entre la acidez y la dulzura, el color más irresistible y el producto más versátil y saludable para nuestra dieta. La manzana Pink Lady® está marcada por su estacionalidad, debido a un largo ciclo de maduración de siete meses. El resultado es una fruta de buena calidad con una gama de calibres equilibrada y un alto índice de azúcar natural.

Un momento crucial
El campo de flores, que luego serán manzanas, se extiende marzo y abril. La época de la floración es clave para el éxito de la cosecha. La vida de una flor varía entre dos y diez días, por lo que el periodo de polinización es corto. Es aquí cuando los insectos polinizadores, especialmente las abejas, juegan un papel fundamental para fecundar las flores y permitir que se conviertan en manzanas. Gracias a la colaboración con los apicultores, los productores introducen colmenas en los huertos —cuando es necesario— durante este período, para garantizar la polinización natural y el éxito de la metamorfosis de la flor en fruto. La presencia de abejas domésticas y silvestres influye favorablemente en el peso de los frutos, en su forma y en la cantidad de pepitas; en resumen, en la calidad global de las manzanas. Aquí las abejas son las grandes aliadas y responsables, en buena parte, de que año tras año, en torno al mes de diciembre, el consumidor pueda disfrutar de una manzana sin igual. Pink Lady, firme en su compromiso de respetar el medio ambiente y consciente de la importancia de este insecto, lleva a cabo la campaña Bee Pink, un programa que está pensado para todos los productores Pink Lady; consta de varias jornadas de sensibilización y de una guía que recopila los conocimientos técnicos y puntos clave para proteger a las abejas en los huertos durante todo el año. El objetivo es que el 100% de los productores Pink Lady estén comprometidos con un enfoque sostenible del cuidado de los campos de cultivo y, por ende, de esta fruta.

Todos aquellos que quieran sentirse parte de la evolución que los manzanos Pink Lady experimentan a lo largo del año pueden sumarse a la iniciativa Apadrina un árbol, una acción gratuita y especialmente pensada para los consumidores, que solo necesitan registrarse en www.apadrinaunarbolpinklady.es para ser testigos de este mágico proceso.

Pink Lady
Cultivadas en Lleida y Girona, las manzanas Pink Lady son el resultado del trabajo riguroso y apasionado de 70 productores españoles que trabajan en pequeños terrenos y comparten unos valores de respeto a la tierra y al tiempo que necesitan estas manzanas para lograr una organolepsia muy especial. Por su color característico, su textura crujiente y su sabor inimitable, la manzana Pink Lady se ha convertido en una variedad única que ha sido fuente de inspiración para Jordi Roca –el pequeño de los Roca, que ha diseñado varios helados de Pink Lady para sus tiendas Rocambolesc– chefs como Joaquín Felipe o Pepe Solla, bartenders como Diego Cabrera, Miguel Pérez o Nagore Arregui e incluso diseñadores de moda como Agatha Ruiz de la Prada, quien diseñó una bolsa para su transporte en las alegres tonalidades que caracterizan su trabajo y con el rosa Pink Lady® como pantone protagonista.