Alberto Orte presenta Vara y Pulgar Blanco, el vino que completa la gama de Vara y Pulgar. Elaborado con uvas propias cultivadas en las viñas de la propiedad, pero también con uvas de la variedad palomino fino procedentes de productores colaboradores de la zona, con la intención de que sea una gama de vinos que representen la mejor expresión de la añada y de los sabores y características propias del Marco de Jerez.
Vara y Pulgar Blanco abre una nueva dimensión de vinos blancos no fortificados en el Marco de Jerez. En él se combina la variedad palomino fino de albariza con otras variedades jerezanas como la vigiriega blanca, la malvasía y un porcentaje pequeño de mezcla de otras variedades autóctonas provenientes de la propiedad, que complementan la personalidad de la uva palomino con los aromas y sabores propios de las otras variedades, lo que le otorga una perfecta combinación de sabores de fruta intensos, de uva madura y fresca, así como una expresión de la salinidad del suelo y una textura caliza aterciopelada en boca. Es un vino que invita a seguir bebiendo, cuenta con buena acidez, con aromas personales, como cítricos y frutas de hueso, un vino equilibrado, fresco, salino, persistente y coherente con la zona en la que se produce. Vara y Pulgar blanco, al igual que su homónimo tinto, es un vino pensado para su disfrute y consumo desde el momento de su embotellado.
Vara y Pulgar Blanco es un nuevo vino del proyecto iniciado por Alberto Orte en Jerez, que ha recuperado una rica colección de plantas de genética antigua y variedades autóctonas históricamente presentes en el Marco. Muchas de estas variedades estaban desaparecidas, y gracias a un esmerado trabajo de investigación y selección, ahora Jerez cuenta con un campo madre pionero en la región y único en España. La recuperación de estas variedades supone un nuevo capítulo para la historia vinícola de Jerez y permite la creación de vinos excepcionales, vinos concentrados con mucho sabor que demuestran complejidad y diversidad de matices.
El proyecto de vinos de Alberto Orte crea vinos que expresan las cualidades de la tierra y que a la vez son disfrutables. Para Alberto, la esencia de un vino excelente está en la materia prima, en la uva, y busca la elaboración de vinos transparentes que permitan saborear lo mejor de cada variedad, suelo y región. El trabajo que desarrolla es meticuloso y preciso, y atiende a todas las etapas de creación de un vino, desde el trabajo de campo al embotellado final. El proyecto es un caso único en Jerez y presenta un modelo de viticultura artesanal que se fija en procesos centenarios, pero a los que aporta el conocimiento actual y procesos innovadores.
Alberto Orte en Jerez
El proyecto de vinos no fortificados de Alberto Orte y de vinos generosos (Bodegas Poniente) en el Marco de Jerez es el legado más personal del viticultor Alberto Orte. Un proyecto en el que se han recuperado 26 variedades extintas de uva históricamente presentes en Jerez. Las viñas están cuidadas y trabajadas bajo un planteamiento ecológico y artesanal, sin herbicidas ni fertilizantes inorgánicos. Alberto Orte busca continuamente el equilibrio entre la naturaleza y la bodega, cuidando al máximo la identidad de la tierra con técnicas respetuosas, aportando a sus vinos transparencia, expresión varietal y equilibro.
