Ingelectus ha finalizado la fase 2 y última del proyecto DT4Flex llevado a cabo con las compañías Cuerva, Bamboo Energy y Smart City Cluster. El DT4Flex supone un paso importante en la tecnología de gestión de la red por ser es un gemelo digital de baja tensión que se compone de una herramienta capaz de predecir los eventos a corto plazo y evaluar la disponibilidad de servicios de flexibilidad para resolver problemas derivados, maximizando así la penetración segura de nuevos agentes.

Durante el año de trabajo que ha ocupado la segunda fase activa del proyecto se ha conseguido optimizar la herramienta para incorporar la resolución de nuevos problemas, como la congestión del conductor neutro por medio de la activación de recursos de flexibilidad. Asimismo, se ha desarrollado un módulo de predicción de cargas y generación a nivel de usuario utilizando diferentes técnicas de inteligencia artificial que permiten a la herramienta adelantarse a incidencias futuras.

Rubén Carmona, responsable del proyecto, ha afirmado que “DT4Flex ha servido para abordar muchos elementos de gran relevancia, incluido el diseño de la arquitectura de comunicación entre agentes de los mercados locales de flexibilidad, la extensión de modelos CIM para flexibilidad en distribución, así como los datos de la red de Cuerva para desarrollar una PoC”.

El funcionamiento de DT4Flex se ha validado sobre las redes de baja tensión de cuatro centros de transformación del núcleo urbano de Escúzar, dentro del living lab de Cuerva, utilizando datos reales procedentes de la supervisión avanzada de baja tensión y los smart meters allí ubicados. Cabe destacar que para las pruebas se han tenido en cuenta escenarios actuales y otros futuribles, de manera que las capacidades han sido estimadas en base a diferentes características realistas y posibles, tanto de los recursos como de los escenarios.

Resultados
En la realización del diseño y la implementación de este proyecto han surgido retos tecnológicos y eléctricos importantes que Ingelectus ha sabido resolver, además de dar respuesta a cuestiones sobre cómo debe ser la distribución, ubicación y tipología de los recursos de flexibilidad en baja tensión o qué capacidad de penetración fotovoltaica pueden alojar estas redes. Los resultados obtenidos son muy satisfactorios:

● Incremento del nivel de observabilidad de red en baja tensión, tanto desde el punto de vista del estado de operación como de la influencia de nudos y acometidas entre sí.

● Mejora de la precisión del conocimiento eléctrico del comportamiento de la red.

● Formulación de un problema de optimización lineal y determinista con tiempos de convergencia reducidos y basado en la física de la red.

● Implementación de técnicas de deep learning sobre un problema necesario para las distribuidoras, como es predecir el comportamiento futuro de sus redes.

● Evolución de la herramienta a una arquitectura basada en microservicios que permita su despliegue y escalabilidad en cualquier entorno.

● Diseño de una metodología que tiene en cuenta la repercusión eléctrica de la flexibilidad para identificar áreas de influencia donde es más ventajoso ubicar recursos de flexibilidad.

● Desarrollo de una ampliación de la herramienta que permite calcular el hosting capacity fotovoltaico de las redes de baja tensión.

● Inclusión de los criterios económicos del coste de activación de servicios de flexibilidad de manera que la solución no sólo sea óptima desde el punto de vista técnico sino también sea la opción más rentable.

La validación de la herramienta del DT4Flex en un entorno relevante como el living lab de Cuerva ha abierto su capacidad de aplicación en cualquier entorno de computación, sin olvidar resaltar que “conocer las posibilidades que ofrecen los proveedores de servicios de flexibilidad y simular los requerimientos que se les exigirán para participar en la gestión de redes son aspectos que facilitarán a las distribuidoras manejar con efectividad las perspectivas futuras”, ha expresado Rubén Carmona.

En la misma línea de resultados, el DT4Flex permitirá que los operadores de sistemas de distribución ejecuten con capacidad de exactitud al asegurarse de que esta participación de los recursos de flexibilidad en la gestión de redes se hará en igualdad de condiciones y que los resultados que arroje la herramienta responderán únicamente a criterios de optimización técnica y económica. Estos resultados vienen a confirmar que la inversión en digitalización de redes es algo que las distribuidoras deben tener en cuenta a la hora de avanzar y competir en el mercado.