La compañía andaluza Detea ha presentado en un encuentro informativo con los medios de comunicación los datos alcanzados por la compañía en el pasado año de 2016. La cuenta de resultados, presentada por el presidente de la empresa, Arturo Coloma, arroja un volumen de negocio al final del ejercicio de 9,6 millones de euros, triplicando así la facturación del año anterior, y con un ebitda del 7,3%, superior incluso a la previsión del 5% marcado por el plan estratégico. Igualmente, durante el pasado año la empresa duplicó su plantilla, pasando de 30 a 60 empleados, la mayoría de ellos profesionales de formación post-universitaria.
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Detea, según su presidente, ha logrado “afianzar su posición en el mercado como constructora referente” en tres aspectos fundamentales: el comercial, consiguiendo las homologaciones de las principales promotoras e inversores privados y optando a licitaciones por valor de 500 millones; el operacional, con más de 20 millones de obras en producción; y el financiero, con un fondo de maniobra de 4 millones y una reducción del 30% su deuda financiera neta, que se queda en 5,5 millones, por debajo de la previsión de 7 millones marcada por el Plan Estratégico de la compañía. “Detea ha hecho sus deberes y se encuentra en la situación idónea para lograr ritmos de crecimiento aún mayores y acometer volúmenes de obras mayores”, ha explicado Arturo Coloma.
Detea también logró en 2016 cumplir con el objetivo de volumen de contratación, adjudicándose nuevos contratos por importe de 10 millones de euros, que dejan la cartera de contratación comprometida por encima de los 70 millones. Y Las perspectivas para el cierre del presente ejercicio también son de crecimiento. En concreto, Detea prevé rozar los 20 millones de euros en nuevos contratos a finales de 2017, y alcanzar una facturación de 15 millones, manteniendo el objetivo de llegar hasta los 30 millones en 2020. Asimismo, la plantilla será superior a 70 empleados.
Todo ese crecimiento lo está logrando Detea a pesar del estancamiento de la licitación pública, soportado por el sector privado, “lo que demuestra la enorme confianza y credibilidad de la compañía por parte del mercado”, ha asegurado Arturo Coloma, que ha señalado que los nuevos contratos de edificación están bastante repartidos entre el sector residencial, hotelero e industrial, “aunque es cierto que hay un movimiento especial e interesantes expectativas de negocio en el sector residencial”, donde DETEA acaba de lograr dos importantes contratos en España para cliente internacional en el segmento del gran lujo.
Durante el presente año, Detea está acometiendo asimismo el gran reto estratégico de la transformación digital de la compañía, tanto a nivel interno en gestión de procesos, como a nivel externo, acercándose a las necesidades del cliente, captando oportunidades en origen, ofreciendo un servicio de mayor valor y disminuyendo los tiempos en las gestiones.