En 2009, desde Castillo de Canena dieron inicio a un ambicioso proyecto: la creación de un jardín donde florecieran variedades de olivos de diversos países de la Cuenca Mediterránea. Este proyecto no solo buscaba recrear un espacio verde, sino también rendir homenaje a un árbol totémico con una historia que se remonta a 5 milenios. Así, con el apoyo técnico del Instituto de Investigación y Formación Agraria y Pesquera (Ifapa), esta iniciativa se convirtió en un espacio para ensayos y descubrimientos.
En una parcela de aproximadamente 2 hectáreas plantaron más de 30 variedades de olivos, acompañados de acebuches provenientes de 14 lugares distintos, que convivieron con las 9 preselecciones elegidas por el Ifapa. A lo largo de estos 15 años, desde la marca han seguido de cerca el desarrollo fisiológico de los olivos, su adaptación al clima y suelo autóctonos, así como su resistencia a plagas y enfermedades locales. También han explorado los perfiles sensoriales y los atributos organolépticos de los Aceites de Oliva Virgen Extra (AOVE) derivados de estas variedades, analizando la influencia del ‘terroir’ en sus características de sabor y aroma.
Su objetivo era claro: ampliar la paleta de sensaciones olfativas y gustativas de sus productos, complementando los sabores tradicionales de nuestras variedades Picuales, Arbequinos y Royales. En este camino, han dado un paso significativo con la presentación de la primera edición de Summa Varietalis en la cosecha de 2023.
Este blend excepcional combina algunas de las variedades cultivadas en su huerto, seleccionadas meticulosamente para esta edición inaugural: Arbosana, Mollar de Cieza, Pico Limón y Ocal de España; Zaity y Souriani de Siria; Chemlali de Túnez; Maelia de Israel; Leccino de Italia; Koroneiki de Grecia y Galega de Portugal.
El nuevo Summa Varietalis es un aceite de un verde dorado intenso y frutado, que deleita por su frescura. Su armonía única entre notas verdes y frutales se despliega gradualmente en nariz y boca, desde una entrada suave hasta una experiencia enriquecida con notas dulces y verdes. La complejidad se revela con la presencia de hierbas silvestres, frutos secos y un sutil pero impactante picante, culminando en un retrogusto prolongado y gratificante.
Dada su singularidad, se recomienda disfrutarlo en platos que permitan destacar su protagonismo, como purés de legumbres o vegetales, pescados al horno, tostadas con quesos frescos, distintos panes o patatas asadas.
Con este nuevo lanzamiento de Summa Varietalis, Castillo de Canena celebra la diversidad y complejidad de los aceites de oliva, invitando a todos a disfrutar de una experiencia gastronómica única y auténtica, como solo la marca sabe hacerlo.
