Con una inversión total estimada de 270 millones de dólares (249,5 millones de euros), la compañía ha firmado un acuerdo con el Ayuntamiento de Jacksonville (Florida) para la adquisición de terrenos y el desarrollo de una nueva planta de fabricación en la localidad norteamericana. El objetivo de esta infraestructura, que contará con los más altos estándares en sostenibilidad, es dar un servicio más eficiente, atender la demanda de su principal mercado mundial en ventas, y reducir su huella de carbono. Norteamérica (EE.UU. y Canadá) genera casi el 60% de la facturación total del grupo, mercado dónde cuenta con una de las mayores redes logísticas y de distribución de una compañía española con 60 infraestructuras propias.