El arte de las masas llega a Sevilla, de las manos del chef italiano Massimiliano Prete, creador inicial de SestoGusto. La apertura oficial ha tenido lugar este viernes y Sevilla se convierte en el primer restaurante fuera de Italia, con el que se invita a descubrir el lenguaje gastronómico de las masas especiales, ligeras, digeribles y sabrosas.

El evento ha contado con la presencia de Massimiliano Prete, maestro lievitista (levadurista) y Albert Adriá. SestoGusto llega a la antigua Plaza del Pan para dar color con su arte en la masa y la cocina a la carta. “Lo que hace único mi trabajo es la investigación constante sobre la masa, a la que considero la verdadera protagonista. No sólo hago pizza: estudio harinas, fermentaciones e hidrataciones, y creo masas que cuentan una historia, que evolucionan. Mi producto no está creado para sorprender, sino para emocionar. Es el resultado de la técnica, la sensibilidad y el respeto por la materia prima. Cada pizza es un equilibrio entre tradición e innovación, entre memoria y futuro”, afirma Prete.
Prete, afincado en Piamonte, cuenta con una reconocida trayectoria, marcada por la investigación continua alrededor de las harinas y los fermentados hasta conseguir la máxima calidad. Sin perder la esencia italiana, Sesto Gusto trae a Sevilla innovaciones en sabores y productos que hasta hace poco no existían en este mercado. “Me gusta que la tradición se encuentre con la innovación, porque así el sabor es fruto del estudio y la sensibilidad. No venir sólo a comer, sino a experimentar un viaje gastronómico que habla de italianidad, pero también de evolución y respeto por la materia prima”.

A esta experiencia inmersiva contribuye también la calidez del espacio, con capacidad para 86 comensales, y un pequeño rincón donde comprar algunas de las materias primas seleccionadas por Prete e incluidas en el menú. El nombre de su restaurante hace referencia a ese sexto sabor, identificado científicamente como la sensibilidad de nuestra boca al sabor de los carbohidratos.
El chef presenta masas, ingredientes y platos que respetan la estacionalidad, y maridajes que despiertan la curiosidad. “Es un cuidado viaje a través de texturas, aromas y recuerdos. Me relaciono con mi producto como un artesano que dialoga con la materia viva, con paciencia e intuición. La masa nunca es la misma; cambia con el tiempo, con la humedad, con la energía que le infundes. No la controlo, la escucho”.
Sevilla será el punto de partida del proyecto de internacionalización de Sesto Gusto, que pretende expandirse por más ciudades españolas en los próximos años.