A la espera de que en breve lo confirmen las estadísticas, este 2014 Andalucía podría haber pulverizado todos sus récords turísticos al rozar la marca de 50 millones de pernoctaciones en los establecimientos reglados. El sector, que desde que se produjo el pinchazo de la construcción ejerce de abanderado de la economía andaluza liderando su recuperación, desafía con su dinamismo a quienes abogan por una mayor aportación industrial al PIB regional.

De momento, ésta es muy inferior al 12,8% que supone la actividad turística. Una actividad que viene creciendo desde hace años, soportando los embates de una crisis internacional que ha hecho mella en las economías de los principales países emisores de turismo hacia Andalucía (Reino Unido, Francia, Alemania y la propia España), con la consiguiente menor afluencia de turistas.

No obstante, la recuperación parece que va bien encaminada y en 2013 Andalucía recibió la visita de 22,4 millones de personas –un 4% más que el año anterior– que reportaron unos ingresos estimados en 16.400 millones de euros y emplearon a unas 330.000 personas –el 15,7% del total nacional–.

No se equivocan los principales directivos andaluces cuando, en el Barómetro de Expectativas que cada año elabora Andalucía Económica, señalan al turismo como actividad más dinámica de nuestra economía para el siguiente ejercicio. El año pasado –con vistas a 2014–, compartía esta opinión un 59% de los empresarios consultados, porcentaje que en la presente edición ha aumentado hasta el 66,7% de los participantes en la encuesta. Esta holgada mayoría considera que, en 2015, el turismo seguirá siendo locomotora de nuestro desarrollo.